Normalmente el montante más elevado de una herencia lo forman los inmuebles del fallecido, por lo que te puedes estar planteando cuál es la mejor manera de transmitir estos inmuebles a tus herederos para que tributen el mínimo posible, sin cometer ningún ilegalidad. Por eso existen las reducciones y las bonificaciones.
Transmitir inmuebles por vía donación en vida no es una buena opción, si no es que tienes un patrimonio superior a los 2 millones de euros. Entonces, tal vez sí conviene, pero no todos los inmuebles.
Hoy por hoy, transmitirlos por herencia es la opción más económica. Ahora bien, se pueden transmitir cada uno por separado o bien como un conjunto integrado en una sociedad que se dedique a sacar rendimiento de estos inmuebles. Esta segunda opción te reduce mucho la fiscalidad futura de la herencia, pero no es útil si sólo dispones de cuatro o cinco pisos alquilados; en cambio sí que vale la pena si dispones de bastantes pisos o locales o de algún edificio destinado a alquiler. Ahora bien, tienes que afectar estos inmuebles a la actividad de una sociedad, que tengas almenos un trabajador ajeno a la familia trabajando a jornada completa y en un local destinado a esta actividad. Además, esta actividad se debe haber puesto en marcha un mínimo de tiempo antes de la muerte del propietario y el heredero la debe mantener durante un mínimo de cinco años después de la muerte del causante.
Por lo tanto, si tienes algunos inmuebles y quieres empezar a planificar tu herencia, desde el Bufet Molina Bosch te recomendamos que tengas en cuenta la fiscalidad de cada supuesto porque llegado el momento, si lo tienes bien organizado, podrás aligerar la carga fiscal de tus herederos.